“Finalmente Marduk se volvió sobre Tiamat ,le partió el cráneo y dividió en dos el cadáver,como un pescado seco;una mitad se convirtió en la bóveda celeste y de la otra se formó la tierra.Marduk erigió en el cielo una réplica del palacio del apsu y fijó el curso de las estrellas”
Enuma elish. Principal texto cosmogónico sumerio
Enuma elish en acadio significa “Cuando en lo alto...” y ejemplifica perfectamente una serie de repeticiones y tendencias presentes en numerosas cosmogonías celestes a lo largo de la historia. En ella apreciamos el valor de un “sacrificio cósmico” en el que un dios antiguo es desmembrado para construir tanto la bóveda celeste como la Tierra (podemos encontrarnos ejemplos similares en la mitología nórdica con Ymir,Purusha en la hindú...etc). En ella apreciamos la transición de un tiempo primigenio, en cierta manera de un Caos, poblado por Gigantes y Monstruos, por Arquetipos Femeninos Eternos, a otro con leyes y soberanías más asociadas con el Logos y la linealidad . Los Dioses Antiguos, ahora ociosos, y la preeminencia de Diosas Ctónicas, dejan paso a una estirpe de divinidades uránicas de carácter hegemónico, aún tiránicas e irascibles pero con códigos notablemente
normativos y antropomórficos. La bruma del No-Tiempo y el Caos se levantan aparentemente en favor de un nuevo orden, aunque los intentos de simplificación antropocéntrica siempre serán cautivos del aspecto numinoso de la divinidad permaneciendo ésta como la Otredad insondable, el límite y frontera de nuestro entendimiento al asomarse al Abismo, concepción ligada a lo expresado por Kant (cosa-en si o Noúmeno) , Schopenhauer (Voluntad) e irónicamente también por positivistas como Wittgenstein en su Tractatus :"Los límites de mi lenguaje son los límites del mundo"
Al mismo tiempo, especialmente con la expansión del pueblo indoeuropeo, asistimos a una separación del Cielo y la Tierra. El principio telúrico femenino convive pero pierde preeminencia frente a un principio activo masculino, a un Dios regente que se manifiesta desde lo alto,dioses metereológicos,Zeus y su rayo, que justifican el carácter bélico de estos pueblos invasores indoeuropeos , arios cuyo motor económico está basado en la guerra y la esclavitud (y sin embargo, presos aún de leyes inmutables,arquetipos y divinidades femeninas creadas mucho antes que ellos ,las cuales hilan y deshilan Destino ,Muerte y Regeneración de la creación inagotable ).
Desde que el hombre primitivo alzó la cabeza hacia las estrellas imaginó en esa bóveda celeste, en esa altura inalcanzable la fuente de todos sus bienes, pero también la causa de todos sus horrores, la "colérica región" que mencionaba William Blake, los cuales se precipitaban inexplicablemente hacia él. Su creciente capacidad de raciocinio y el paso de la actividad cazadora a la agrícola le hizo esmerarse en tender puentes con esa insondable altura,en comprender los ciclos solares y mediante saberes mánticos como la Astrología, estudiar a la vez la multiciplidad divina y relacionarla con la luz presente en el Alma humana (esa alma platónica que guarda el fuego y quiere recordar su origen,regresar al mundo de las Ideas ).
La idea de lo circular, del centro a partir del cual todo se expande, fue comprendida por el hombre intuitivamente al mirar el Sol.EL círculo no agota su significado en una forma geométrica, sino que también representa la ausencia de tiempo lineal , el eterno retorno que no para de girar en mismo sentido (Uni-Verso) y que con su constante movimiento, imitado por los Derviches en su danza alrededor de un eje y a la vez por Nataraja,el Shiva danzante,simbolo de ese mundo que se crea y se destruye al mismo tiempo como también desarrolla Heráclito asemejando el Devenir a un niño que hace y deshace castillos de arena con total naturalidad.Todo cambia para volver a ser lo mismo, el Mandala como cartografía de un Centro inasible.
Luz y fuego animan al ojo, al mundo sensible del hombre , emanando sus bienes y haciendo posible su supervivencia, pero al mismo tiempo éste es consciente de su reverso, el Sol de Medianoche presente en su interior , la luz de las tinieblas, la Noche Oscura del Alma que ilumina la epifanía de San Juan de La Cruz. Famosos ejemplos encontramos en los pueblos germánicos (Sol Negro, erróneamente famoso por el Esoterismo Nazi pero que existe mucho antes que él como símbolo de la renovación eterna de la vida) y por la Alquimia en el término conocido como NIgredo donde la putrefacción y disolución telúrica de la materia crea una nueva de orden superior.
Cielo,círculo,tiempo,eternidad,sublime,inaccesible..Todo partes inconexas de un sueño que nos sueña,como en "Las Ruinas Circulares" de Borges, y que durante un fugaz momento descubre un secreto que volveremos a olvidar
Comentarios